domingo, 13 de febrero de 2011
domingo, 6 de febrero de 2011
Los seres vivos y el medio ambiente. Adaptación
Para empezar a hablar de adaptación hay que partir por definir este concepto, es por eso que decimos que adaptación es: el proceso por el cual el organismo se va haciendo capaz de sobrevivir en determinadas condiciones ambientales.
Esta capacidad de supervivencia se transmite de generación en generación a través de caracteres hereditarios que permiten aumentar la capacidad de supervivencia de los individuos. El sistema respiratorio de los mamíferos marinos, como el delfín, la ballena, las focas y los lobos marinos, se ha modificado a través del tiempo para permitir que el animal permanezca sumergido en el agua durante un tiempo largo. Y así con los distintos tipos de vertebrados, reptiles, etc. las adaptaciones son distintas, ya que no es lo mismo vivir rodeado de agua que vivir rodeado de aire; no es igual desplazarse en el agua que desplazarse sobre el suelo.
Las adaptaciones de un organismo a un medio determinado son procesos lentos y complejos que dan como resultado que en los seres vivos se formen o desarrollen órganos adecuados que les permitan realizar su vida en dicho medio.
TIPOS DE ADAPTACIONES:
Adaptaciones estructurales:
En el curso de la evolución, los organismos han experimentado sucesivas adaptaciones estructurales cuando el medio ambiente cambia o cuando emigran a un nuevo medio ambiente.
Adaptaciones al color:
Las adaptaciones para supervivencia son evidentes en el color y disposición de plantas y animales, así como en su estructura y procesos fisiológicos. Los especialistas en ecología reconocen tres tipos de adaptación al color: coloración protectora o de ocultación, que permite al organismo entonar con el fondo y pasar así inadvertido a sus enemigos; coloración de aviso, la cual consiste en tonos brillantes y visibles, llevados por los animales venenosos o de gusto repulsivo para advertir a los posibles enemigos de presa que vale mas que no los devoren, y mimetismo con el cual el animal toma el aspecto de otro ser vivo o incluso de un objeto inanimado.
La coloración protectora puede servir para ocultar al animal que desea escapar a un enemigo potencial, o ser adoptada por dicho enemigo con el fin de pasar inadvertido a su posible presa.
Si un animal esta equivocado de colmillos distribuidores de ponzoña, mecanismos hará aguijonear reservas de productos químicos que les den sabor repulsivo, es ventajoso para ellos que esta cualidad sea bien conocida, por lo que es frecuente que los seres de este tipo exhiben colores de advertencia.
Sirve de ejemplo interesante un sapo europeo con piel abdominal intensamente roja; este animal dispone de unas glándulas cutáneas cuya secreción les comunica sabor muy desagradable.
Adaptaciones de las Aves: Anatomía y fisiología
La mayoría de las aves puede volar y desciende de antepasados que podían hacerlo, aunque hay especies, que se han extinguido, que no eran voladoras. Además, el cuerpo de las aves está modificado para aumentar la eficacia del vuelo. Los huesos de los dedos y las articulaciones de las patas delanteras están fusionados formando un soporte rígido para las grandes plumas de vuelo de las alas. También existe fusión ósea en el cráneo y en la cintura pelviana, así se obtiene una mayor resistencia y ligereza. En las aves adultas muchos de los huesos están huecos, carecen de médula y están conectados con un sistema de sacos o bolsas aéreos dispersos por todo el cuerpo. El esternón, o hueso del pecho, de la mayoría de ellas es grande y tiene una quilla o cresta central llamada Carina. El esternón y la Carina soportan algunos de los principales músculos utilizados en el vuelo.
Adaptaciones de los vegetales al ambiente acuático.
Los vegetales acuáticos se distribuyen en el ambiente de las aguas oceánicas y en el de las aguas continentales.
Las algas presentan modificaciones en su forma corporal, las cuales reflejan su adaptación a las condiciones de alimentación y de luminosidad de la zona en que se encuentran.
Adaptaciones de los animales al ambiente acuático.
En el caso de los animales acuáticos también hay adaptación en el tipo de desplazamiento o sea todos los movimientos que permitan a los animales capturar su alimento, reproducirse, relacionarse con los demás seres que le rodean, escapar de sus enemigos y protegerse.
Adaptaciones de los vegetales al ambiente terrestre.
Las adaptaciones de los vegetales que habitan en el ambiente terrestre están en función del clima y del tipo de suelo de cada región.
Los vegetales terrestres han debido sobreponerse a una serie de condiciones adversas planteadas por el ambiente. Entre ellas figuran:
Los vegetales terrestres han debido sobreponerse a una serie de condiciones adversas planteadas por el ambiente. Entre ellas figuran:
- la necesidad de un medio de fijación al suelo.
- los distintos tipos de suelo.
- la disponibilidad de agua y de luz.
- los cambios climáticos.
sábado, 5 de febrero de 2011
ALIMENTACIÓN EN LOS ANIMALES
LA ALIMENTACIÓN DE LOS ANIMALES
Los animales son consumidores y dependiendo de qué comen se les llama de diferente manera: herbívoros, carnívoros y omnívoros.
Los caballos, conejos, vacas, algunas aves e insectos son animales herbívoros dado que consumen nada más plantas.
Estos animales sirven de alimento a los que se llaman carnívoros, puesto que se alimentan de carne, como el gato, el tigre, el tiburón, el lobo y algunas aves, como el zopilote, que consumen únicamente insectos y animales muertos.
Algunos más, como el cerdo, el oso, la gallina y ciertos peces que comen plantas y animales se llaman omnívoros.
Los seres humanos también comemos tanto plantas como animales, así que somos consumidores omnívoros.
Los caballos, conejos, vacas, algunas aves e insectos son animales herbívoros dado que consumen nada más plantas.
Estos animales sirven de alimento a los que se llaman carnívoros, puesto que se alimentan de carne, como el gato, el tigre, el tiburón, el lobo y algunas aves, como el zopilote, que consumen únicamente insectos y animales muertos.
Los seres humanos también comemos tanto plantas como animales, así que somos consumidores omnívoros.
ALIMENTACIÓN DE LAS PLANTAS
A diferencia de los animales que se alimentan de materia orgánica, las plantas se alimentan de materia inorgánica. La absorción de los elementos químicos se produce fundamentalmente a través de sus hojas y a través de sus raíces. Del aire toman el carbono y el oxígeno que se encuentran combinados formando el dióxido de carbono ( CO2). El proceso de fotosíntesis es capaz, con la ayuda de la luz solar, de convertir este compuesto junto con el agua y los minerales tomados del suelo en azúcares. ( Más información sobre la fotosíntesis en el listado superior) Carbono, oxígeno e hidrógeno constituyen los nutrientes no minerales.
CARACTERÍSTICAS DE LOS SERES VIVOS
Los seres vivos son organismos que nacen, se nutren, respiran, se desarrollan, crecen, se reproducen y mueren. Lo no vivo no tiene la capacidad de hacer nada de esto, no sigue este ciclo continuo y ordenado de cambios.
Para distinguir con mayor facilidad algo vivo de algo que no lo está, resulta útil saber que existen ciertas características que sólo poseen los seres vivos, y son las que se indican a continuación:
Nutrición. Los seres vivos se alimentan de sustancias nutritivas del medio ambiente. En su interior circulan líquidos que transportan los nutrientes y otros elementos indispensables para la vida. También tienen la capacidad de almacenar en algunas partes de sus cuerpos y de desechar lo que no necesitan.
Respiración. Posibilita que los nutrientes que hay en los alimentos se transformen en la energía que permite a los seres realizar todas sus funciones.
Respiración. Posibilita que los nutrientes que hay en los alimentos se transformen en la energía que permite a los seres realizar todas sus funciones.
Desarrollo. Como consecuencia de la alimentación y de diversas reacciones que se efectúan en el interior de sus organismos, al asimilar los nutrientes, los seres vivos se transforman y se desarrollan durante toda su vida. Algunas de estas reacciones permiten que se conserven sus cuerpos y que se reparen cuando resulta necesario, por ejemplo, el ser humano, para desarrollarse, produce más sangre, más músculos y más piel; sus órganos internos cambian de tamaño y de funciones.
Reproducción. Los seres vivos se multiplican y producen otros seres vivos semejantes a ellos: los huevos de aves generan aves, las semillas de frijol producen plantas de frijol y las personas dan vida a otras personas. Mediante sus descendientes, dan continuidad a su existencia en la Tierra.
Irritabilidad. Los seres vivos reaccionan a estímulos del medio ambiente como el frío, el calor, la humedad, la luz, el sonido, el olor y la presencia de otros seres vivos. Cuando estos factores varían su intensidad, provocan diferentes respuestas en las plantas y animales.
Adaptación. Los seres vivos enfrentan las condiciones poco favorables que les plantea el ambiente en el que viven. Cuando se producen cambios en su entorno, como un incendio, una helada, una sequía u otro fenómeno que les amenaza, los seres vivos tienden a trasladarse a otros lugares o a adaptarse a la nueva situación.
La adaptación es un proceso de cambios complejos que se producen poco a poco; frecuentemente tardan muchas generaciones, hasta que se perfeccionan. Los organismos que no logran adaptarse, mueren y con ellos se extingue la posibilidad de dejar descendientes.
Movimiento. Los seres vivos se mueven; muchos de ellos son capaces de cambiar de lugar y cambiar la posición de sus cuerpos para buscar alimento, protegerse, defenderse y buscar bienestar.
Muchos animales se mueven de diferentes manera: caminan, corren, nadan, se arrastran, vuelan, pero hay otros que no se mueven, tal es el caso de algunos organismos marinos como el coral, la anémona, las esponjas, entre otros. Las plantas, aunque no se trasladan a otros lugares, sí tiene cierto movimiento, por ejemplo: algunas giran sus hojas y sus flores hacia la luz o para atrapar insectos con los que se alimentan, sin embargo, este movimiento se debe realmente a una reacción de un estímulo del ambiente, es decir, a la irritabilidad.
Éstas son las principales características de los seres vivos. Sólo los organismos que pueden realizar todas estas funciones, tienen vida. La materia inorgánica, sin vida, no realiza esas funciones. Componentes de la naturaleza no vivos, como el agua, el aire, la tierra, una roca, el Sol, los planetas y las estrellas, no se alimentan, no se reproducen, no reaccionan al ambiente como lo hacen las plantas y los animales.
Reproducción. Los seres vivos se multiplican y producen otros seres vivos semejantes a ellos: los huevos de aves generan aves, las semillas de frijol producen plantas de frijol y las personas dan vida a otras personas. Mediante sus descendientes, dan continuidad a su existencia en la Tierra.
Irritabilidad. Los seres vivos reaccionan a estímulos del medio ambiente como el frío, el calor, la humedad, la luz, el sonido, el olor y la presencia de otros seres vivos. Cuando estos factores varían su intensidad, provocan diferentes respuestas en las plantas y animales.
Adaptación. Los seres vivos enfrentan las condiciones poco favorables que les plantea el ambiente en el que viven. Cuando se producen cambios en su entorno, como un incendio, una helada, una sequía u otro fenómeno que les amenaza, los seres vivos tienden a trasladarse a otros lugares o a adaptarse a la nueva situación.
La adaptación es un proceso de cambios complejos que se producen poco a poco; frecuentemente tardan muchas generaciones, hasta que se perfeccionan. Los organismos que no logran adaptarse, mueren y con ellos se extingue la posibilidad de dejar descendientes.
Movimiento. Los seres vivos se mueven; muchos de ellos son capaces de cambiar de lugar y cambiar la posición de sus cuerpos para buscar alimento, protegerse, defenderse y buscar bienestar.
Muchos animales se mueven de diferentes manera: caminan, corren, nadan, se arrastran, vuelan, pero hay otros que no se mueven, tal es el caso de algunos organismos marinos como el coral, la anémona, las esponjas, entre otros. Las plantas, aunque no se trasladan a otros lugares, sí tiene cierto movimiento, por ejemplo: algunas giran sus hojas y sus flores hacia la luz o para atrapar insectos con los que se alimentan, sin embargo, este movimiento se debe realmente a una reacción de un estímulo del ambiente, es decir, a la irritabilidad.
Éstas son las principales características de los seres vivos. Sólo los organismos que pueden realizar todas estas funciones, tienen vida. La materia inorgánica, sin vida, no realiza esas funciones. Componentes de la naturaleza no vivos, como el agua, el aire, la tierra, una roca, el Sol, los planetas y las estrellas, no se alimentan, no se reproducen, no reaccionan al ambiente como lo hacen las plantas y los animales.
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